Tránsito

"La mecánica de los sentimientos es una mecánica falible. Poco precisa. Dada al error.
Es por ello que nos sentimos proclives a vivir con la desesperación del inminente fallo.
Y todos, quién más y quien menos, o casi todos, vivimos durante mucho tiempo, incluso muchos años, en la senda del aprendizaje.
El aprendizaje de la mecánica falible del universo de los afectos, de la frágil burbuja del sentimiento amoroso."


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Hay un tono anaranjado de luz marchita que acaricia el escritorio.
Y un vaso alargado, digno, con lo poquito que queda de la simbiosis de un complaciente hielo entremezclado con el whisky de ciertos momentos.

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Madrugada de un miércoles a un jueves, con reminiscencia de una madrugada similar a la del tránsito de un domingo a lunes.
En ésta, la que no es mi ciudad.

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