miércoles, enero 24, 2007

Grabadora


“Apreciada Eva,

mediante estas breves líneas deseo sinceramente y sin ironía alguna felicitarte por los éxitos de tu nueva etapa profesional.

Escuetamente -que sé que a partir de ahora dispondrás aún de mucho menos tiempo- : algún run-run al respecto había escuchado en los últimos tiempos, pero bien me sabes poco aficionado a las semillas del opio rumorológico.

Apreciada Eva : te considero lo suficientemente perspicaz contigo misma como para que hayas evaluado pros y contras. La perspicacia bien sabes que no entiende de jardines ni de océanos : pero prefiero que los jardines de la Moncloa puedan ser pisados por zapatos de Cara Moral que no por zapatos éticos del “Todo a 1 Euro”.

Apreciada Eva : brindando por todo ello, y por los silencios y confidencias que aún se mantendrán, cuando leas estas líneas, fiel y leal a tus dictados de protocolo sintético, observarás que estas líneas apenas superan las 150 palabras.

Felicitándote no efusivamente,
Pero Sí atenta, cordial y sinceramente,


Art Alegoría”

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¨El PSOE refuerza su gabinete de prensa de cara a las elecciones municipales y generales con el fichaje de una periodista de la Cadena SER¨
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Art_Alegoría
Ciudad Interior
Enero, 2007

jueves, enero 11, 2007

Disaronno


“En la primavera de 2004 y poco antes del verano, D, varón de 23 años y único hijo de R ingresó en Urgencias en el Hospital Ramón y Cajal. Durante largos meses existió misterio restringido respecto a aquel ingreso : tuve noticia de ello, me interesé por ambos, pero R nunca fue explícita y transparente con las causas que lo motivaron.

R siempre se ha visto obligada a vivir en la esquina de atrás del forzado misterio.
La esquina en la que hizo mudanza ya desde el momento en el que se vió obligada –junto a muchos otros, otras- a dejar Vizcaya en 1982 tras la gota que colmó el vaso con lo de José María Ryan.
Vos, Usted, Tú lees esto y no sabes quién era José María Ryan.
Ni lo que representó. Sin embargo, representó muchas cosas : salvando las distancias, representó la "comunalidad empática" del “me podría haber pasado a mí, te podría haber pasado a ti, nos podría haber pasado a una familia normal como nosotros”.

R se instaló en Madrid y siguió bajándose en la línea azul, pero en la línea azul oscura.
Y si no era azul, era rosa.
Oh.
Juego de palabras.
Y si no era rosa, era azul.
Cuestiones del “Predictor”.
Total : que se quedó embarazada de D y se castraron muchas de sus inmediatas opciones profesionales en su estricta vertiente vocacional.

Polvos con Bombo a los 24, Divorcio sin Platillo a los 30.

Pero como la Tristeza es Caleidoscópica, ello implica que sea Caprichosa en función de la luz que la ilumine : y mutable : años después R crece y crece profesionalmente en la actividad que les daba de comer a ella y a su hijo: e incluso incluso –áaainnnnssss- llega a taconear en la esquina del forzado misterio con el lanzamiento de un novel cantante marketinizado convertido en ambiguo mito de pseudo-talento.

Entre otros.
A la que por supuesto olvidan.

R siempre ha sido muy psico-seminal.
Siempre.
Por esa híbrida mezcla de hacer de su vida un misterio y de dejarse correr en la cara por hombres que en su inmadurez siempre han sido la “leche”.

Pero cuando una Madre está a punto de perder un hijo -su hijo, su único hijo- ni aunque Brad Pritt se precinte la polla con un Ferrero-Rocher una madre está para zarandajas de cremas varoniles.

“- No me mires así, Art. No me mires de esa forma, ó miénteme fingiendo que no sabes lo que ocurrió.”

Tengo los ojos irritados porque no he dormido apenas en los últimos dos días.
Me los froto.
En mi carpeta negra yace, mal colocado, un catálogo de posicionamiento activo de una marca que intentará plagiar el concepto de B-Sign.
Con ella delante, el tríptico catálogo me parece más superfluo que nunca.
Sin embargo nace una simiente contextual : me nacen cuando estoy en el rango de 2-3 días sin apenas dormir. Es una simiente más, y no es psico-seminal. Es una simiente kieslowskiana, y la cámara podría iniciar un giro de 360º finalizando de nuevo en la escena en la que me vuelvo a frotar los ojos.

Mis ojos no quieren mentir a R.
Un muchacho joven de 23 años ingresado en Urgencias, y del que se intenta minimizar y silenciar las causas de lo ocurrido, en general, es porque sólo quedan 3 ó 4 opciones que causen el ingreso, a cuál más dolorosa para una madre.

Sin detalles escabrosos, R en voz muy baja me desgrana cuatro ó cinco pinceladas.
Suficientes.
No abandona su esquina.
Como las Putas de Antaño.
No abandona R la esquina de su misterio.

Un silencio en forma de un 8 gigante se condensa en la estancia.
Y cae como una botella de aceite de oliva en una baldosa.
Se extiende.

No hablo.
No formulo palabra.
Dejamos ambos que el manto de un silencio cómplice ejerza su Dominio sobre la Plataforma de un Dolor.
Sólo dejo que surjan unas lágrimas silenciosas en su cara.
Ochocientas, ocho mil canas en el cabello de R
Y R se parece más que nunca a la Schneider de 1979 con Costa Gavras.

“- Una madre puede admitir, transigir y perdonar todo de un hijo, Art. Debes estar cansadísimo de escuchar esta frase. ¿ Cuántas veces la has ecuchado ¿ ¿ Cien, doscientas veces.. ?”

Y yo estoy superado por la situación.
Y yo, que sé que debo ejercer ahora mismo y aquí, a medio metro de ella, un cigrado de empatía, soy consciente de que es un grado condenado al fracaso, el fracaso sustentado de quien no es madre, de quien no ha parido, de quien no ha amamantado.
Y yo, que estoy muy, muy cansado, y que no quiero asistir a un ejercicio autopunitivo de R, intento minimizar colateralmente sus palabras con una réplica que no es convincente, que no puede ser convincente en forma alguna.

Enciende un cigarrillo e inhala con contundencia.


“- Yo puedo perdonar que mi hijo sea estúpido. Lo que no puedo perdonarme a mí misma es que yo haya colaborado significativamente a que él sea estúpido. Hijo y madre estúpidos : estupidez genética. Le transmito lo que no puedo perdonarme, y sin embargo él me perdona lo que no me puede transmitir. ”

R siempre se ha visto obligada a vivir en la esquina de atrás del forzado misterio.
Pero vislumbro que llegó a sentirse cómoda en la misma.
Tan cómoda que pudo incluso inculcar procesos conductuales.

Y me cuestiono si el forzado misterio nos convierte en estúpidos.
Y si por ende, el misterio no forzado nos torna más sagaces.


***

(R) y (D) son las iniciales -cambiadas- de las personas mencionadas en este texto.
La edad de (D) no es la exacta.
Tampoco el nombre del Hospital en el que se efectuó el ingreso.
***
Art_Alegoria
Ciudad Interior
Enero 2007

lunes, enero 01, 2007

Derribo


“El ajetreo y el bullicio en una de las cafeterías del aeropuerto eran ensordecedores.
Sentada frente a mí, en aquella minúscula mesa, yo la observaba deshacer el azúcar de su café.
Concentrada en sí misma, hacía girar la cucharilla lenta, lentamente.
En escasos minutos ella se dirigiría a la puerta de embarque.
Nuestra asexual amistad siempre tenía scripts sorpresivos que nunca se plasmaban en secuencias de endiosamiento ó de grandilocuencia filosóficas.
Alzó su mirada, hizo un amago de mueca y me pidió que repitiera lo de la noche anterior cuando cenábamos junto a otras tres personas en aquel restaurante de San Bernardo.
Asentí, y le adjudiqué a mi voz el tono jocoso que sabría que le haría sonreir.
Hice un ademán de ponerme ceremonioso, y fingí una breve carintoña al estilo de Harpo Marx.

“ – La tristeza siempre es caleidoscópica. Y hay que concederle el ángulo de visión adecuado : el ángulo que procede de la indulgencia, de la comprensión hacia sí mismo y de la autoexigencia.”
***
Cuarenta y cinco minutos después y a ocho mil pies ella continuaría licuando hacia sus nuevos designios.
Yo conducía y reflexionaba.
Sobre mi ángulo.
Sobre mi ángulo Obtuso.
***
Art_Alegoría
No en la Ciudad de mi Exilio Interior
Enero, 2007